Si aún no te has unido a la ola de jardineros y aficionados a la jardinería que adquirieron un bambú de la suerte, puede que este sea el momento. Conoce un poco más sobre esta planta, sus orígenes y sus cuidados.
El bambú de la suerte, o también llamado Lucky Bamboo por su nombre en inglés se ha convertido en una planta bastante común en diferentes ambientes, tanto en hogares como en negocios.
Puede que sea por la creencia de que brindan prosperidad, fortuna y felicidad a su propietario, o puede que se deba a sus características estéticas que van de la mano con el estilo minimalista y Zen que se ha puesto de moda en cuanto a decoración de ambientes. Esta planta decorativa tiene cada vez más y más adeptos.
El bambú de la suerte, por extraño que resulte, no es en realidad ningún tipo de bambú. Sino que pertenece a una familia totalmente diferente, a la de las rutáceas. Por lo que es más probable que esta planta ornamental tenga más en común con una planta de naranjo que con un verdadero bambú.
Sus orígenes se remontan al África, pero gracias al comercio Oriental, en especial Chino y Koreano es que la planta llego a popularizarse y extenderse en el Asia y el mundo, de echo en muchos del mundo lo llaman bambú chino debido a sus orígenes ancestrales.
Es perenne, y puede llegar a medir entre 10 a 100 cm, en línea recta. Pero también se puede llegar a formar con el tallo diferentes formas entre ellas la tradicional forma de sacacorchos.
Puede ser ubicada en exteriores, directamente en la tierra, pero por lo general es utilizada en interiores en un cuenco de vidrio o un jarrón con piedras decorativas y agua.
En cuanto a riego el bambú de la suerte no es muy exigente, bastará con cambiar el agua del recipiente cada dos semanas durante el invierno y cada semana durante el verano, teniendo siempre cuidado de mantener entre 2,5 y 3 cm de altura a partir de las raíces.
Necesita estar en un área bien iluminada, aunque es mejor que no reciba los rayos del sol de manera directa sino más bien filtrada.
Gusta de temperaturas cálidas por lo que se desarrolla bien entre los 18 y los 25 grados centígrados.
Son pocas las enfermedades que suelen afectar al bambú de la suerte, y son las más relacionadas a la humedad. Las cochinillas y los hongos son problemas muy frecuentes en esta planta.
Se debe tener cuidado con el exceso de agua, si nuestra planta se encuentra en un recipiente con agua y piedras el nivel del agua no debe ser muy alto ya que las raíces, al igual que el tallos o las hojas que resulten sumergidas pueden llegar a podrirse.
Uno de los síntomas del exceso de agua del que puedes percatarte a simple vista es el tono amarillo que van tomando las hojas. Para solucionar el problema bastará con reducir el nivel de agua.
que bueno me gustaría saber mas sobre las plantaciones en un recinto muy cerrado y sobre las plantas de la buena suerte y prosperidad gracias por su informacion
Hoy me acabo de comprar esta .planta y me parece muy interesante y hare lo qe me han enseñado x qe no sabia nada de la planta .gracias chauu