Cuando se trata de cuidar nuestra figura y salud, evitar ciertos alimentos nos parece una verdadera tortura, sobre todo cuando se tratan de ese «gustito» que solíamos darnos para un fin de semana que solo deseamos descansar, consentirnos y olvidarnos del resto. ¿Cómo encontrar un equilibrio entre seguir nuestro plan saludable de alimentación y el deleite que solo unas crepas en el desayuno nos pueden brindar?
Cambiando la receta y creando una nueva opción sin remordimientos ¿tienes dónde anotar?
Sigue leyendo; Sopa de avena
Ingredientes:
- 2 tazas de avena
- 1 huevo
- 1 taza de leche
- sal
- vainilla
- mantequilla en aerosol (opcional)
Necesitamos también:
- sartén anti-adherente
- licuadora
- volteador
El secreto de esta nueva forma de preparar tus crepas o pancakes y por lo que no tendrás ningún remordimiento al comerlas es que vamos a sustituir el principal ingrediente, aquel que nos traiciona y sabotea nuestra dieta pero el que honestamente es la clave de ese delicioso sabor ¿o no? Como pudiste darte cuenta, entre la lista no aparece la harina de trigo y en su lugar hemos puesto (redoble de tambores) a la nutritiva avena.
¿Sabías que el consumo de avena reduce el riesgo de problemas cardíacos?
De hecho, si quieres aún hacer más light esta receta puedes optar por omitir la leche, aunque necesitas tener una licuadora pequeña y con muy buena potencia. Apegándonos un poco más a lo tradicional vamos a colocar las 2 tazas de avena dentro de la licuadora, añadimos el huevo entero (o las claras de dos piezas) y leche suficiente para que al licuar obtengamos una pasta de consistencia media, una pizca de sal al gusto y vainilla.
Dejamos reposar por unos minutos mientras ponemos la sartén sobre la estufa a fuego bajo. Si quieres tu receta con algo de sabor entonces puedes hacer uso de la mantequilla en spray, rocías un poco y viertes la mezcla con movimientos circulares para ayudar a que se esparza uniformemente lo más delgada posible, deja cocer por cada lado unos minutos y listo.
Crepas listas para disfrutar sin remordimiento, puedes comerlas solas o acompañadas, el cambio del sabor será totalmente desapercibido, pero tu figura y tu salud lo agradecerán.
