La disautonomía (fallo en el sistema nervioso autónomo) no es una enfermedad, sino una condición y hay que aprender a vivir con ella.
Una vez que has sido diagnosticada con Disautonomía a diferencia de otros padecimientos donde tras llevar un tratamiento químico (pastillas, jarabes, inyecciones) o quirúrgico (cirugías) hay mejoría notable y hasta cura, con esta condición no es así; depende mucho de la intensidad del padecimiento que dará pauta al tratamiento pero en esencia existe una base para éste que se complementa con tratamiento químico, detalles en la alimentación y modificación de hábitos.
La ventaja al padecer disautonomía desde muy temprana edad es que los mismos síntomas te obligan a tomar medidas y adaptar toda tu vida en torno a la causa y efecto de los problemas o inconvenientes que presentes, sin embargo cuando el padecimiento es detectado ya como adultos es un tanto más difícil tener que cambiar todo lo que ya conocemos y tenemos dentro de la rutina, sin embargo es necesario.
Podría llenarte artículos completos sobre las recomendaciones y medidas a tomar una vez que se ha reconocido se vive con disautonomía pero esta vez quiero irme más por lo que no debes hacer.
Si bien el tratamiento para dicha condición requiere de aprender ciertas reglas, hábitos que solo con el tiempo y basta información entenderemos, el primer paso para mejorar nuestra calidad de vida es evitar lo siguiente:
Excedernos en comidas ya sea en cantidad o tipo
Alimentos grasosos, endulzados y con harinas son veneno puro para los disautónomos, esto porque por lo regular los padecimientos vienen acompañados de alteraciones en el azúcar, insulina o problemas gástricos, así como comidas copiosas o saltarse comidas puede desatar los síntomas.
Fumar
Uno de los principales problemas dentro del cuadro disautónomo está en la oxigenación y circulación así que al fumar solo agravamos los síntomas.
Actividad física extrema
Se debe lograr un equilibrio, como bien dicen ni tan tan ni muy muy, el sedentarismo es igual de dañino para una persona con disautonomía que el exceso de desgaste.
No hacer caso a los síntomas
Aunque es realmente desgastante y desmotivante sentirnos limitados y no poder llevar un ritmo igual que el de una persona «sana», tratar de hacernos los valientes e ignorar síntomas es lo peor que podemos hacer ya que es una manera en a que nuestro cuerpo nos está avisando o pidiendo algo y no hacer caso puede provocar accidentes o un desgaste mayor a nuestra salud.
Automedicación
La automedicación está completamente prohibida en un padecimiento de este tipo ya sea porque se toman otros medicamentos con los que puede haber reacción o simplemente porque parte de los síntomas de la disautonomía es la intolerancia a muchos elementos desde alimenticios hasta médicos.
Sigue leyendo; Qué es la disautonomia