Ravioles de calabaza con manteca de almendras

Ravioles de calabaza con manteca de almendras
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Raciones: 4
 
Este plato de ravioles de calabaza con manteca de almendras es un claro reflejo de la gastronomía romana actual que lleva una salsa suave para no opacar el dulzor del relleno de calabaza con amaretti y canela. Un perfume que se completa con el infalible queso parmesano rallado.
Ingredientes
  • Harina 0000, 300 gramos
  • Yemas, 3
  • Agua, 100 centímetros cúbicos
  • Sal harina fina, a gusto
  • Aceite de oliva extra virgen, ½ cucharada
  • Harina o semolina, para espolvorear
El relleno:
  • Calabaza tipo Kabutiá, 1 mediana
  • Pan del dia anterior rallado, 100 gramos
  • Queso parmesano rallado fino, 100 gramos
  • Biscotti (bizcochos) amaretti pulverizados, 1 puñado
  • Canela, 1 pizca
La salsa:
  • Manteca, 150 gramos
  • Almendras sin piel fina y fileteadas, 50 gramos
  • Hojas de salvia fresca, 2 ó 3
  • Queso parmesano rallado fino, para acompañar
Instrucciones
  1. Para realizar el relleno cortar en 4 partes la calabaza. Ponerla en una placa, tapar con papel aluminio y cocinarla en el horno hasta que este tierna (aproximadamente una hora). Luego retirarla y dejar enfriar. Quitarle la piel y pisar la pulpa con un tenedor o un pisapapa. Agregar el pan rallado, el queso parmesano, los biscotti pulverizados y la canela. Reservar la mezcla en la heladera.
  2. En cuanto a la masa, colocar la harina en la mesada, hacer un hueco en el centro y sumar allí las yemas, el agua, la sal y el aceite. Unir, formar un bollo y dejarlo descansar 30 minutos. Estirar la masa en pequeñas porciones de 1 mm de espesor.
  3. Distribuir el relleno en pequeñas porciones (de a cucharaditas) sobre la mitad de la hoja de masa estirada. Doblar la porción de masa libre sobre la que tiene relleno. Presionar el entorno del relleno para sellar la masa y cortar en cuadrados de 5 cm por la parte sellada. Pinchar los bordes tratando de eliminar el aire del interior. Reservar los ravioles en una bandeja espolvoreada con harina ó semolin y taparlos con un repasador.
  4. Para la salsa, derretir la manteca en una sartén, agregar las almendras fileteadas y las hojas de salvia fresca. Cocinar unos minutos hasta que la manteca tome color avellana y retirar enseguida del fuego para que no se queme.
  5. Calentar en una amplia cacerola abundante agua. Cuando rompa el hervor, salar el agua. Esperar que retome el hervor y echar la pasta en la olla. Cocinar hasta que los ravioles suban a la superficie. Escurrirlos con espumadera y distribuirlos en los platos. Espolvorearlos con queso parmesano rallado y rociarlos con salsa de manteca y almendras.
Notas
La clave: Cocinar la pasta en una cacerola grande, en lo posible más ancha que alta. La proporción ideal es de 10 litros de agua por cada kilo de pasta.
Vino recomendado: Para este plato de ravioles de calabaza con manteca de almendras, un vino rosado de malbec o syrah puede sentar muy bien al paladar.
 

4.7

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