Si has intentado una y otra vez persuadir a tus hijos sobre la película que han elegido (ya que es la quinta vez que la ponen en el día) sin éxito alguno; ¡No te frustres! Esto tiene una explicación.
Si haces algo gracioso tus niños te piden que lo hagas una y otra vez, no cambian de canal aunque la programación se repita, ponen la misma película sin parecer aburrirse, cantan la misma canción por horas, tienes que lavar a escondidas su camisa favorita porque no la sueltan, no dejan de leer el mismo libro aunque ya lo hayan terminado 3 veces y así muchos ejemplos más, creeme; no hay nada de qué preocuparse ya que este comportamiento es completamente normal.
¿por qué?
Los niños son como esponjitas y durante toda su etapa infantil están constantemente aprendiendo y tienen muchas maneras de consolidar este proceso, una de ellas es repitiendo todo.
De hecho, mientras a ti pudiera parecer que tu hijo o hija están perdiendo el tiempo viendo una y otra vez la misma película, la verdad es que están trabajando su retención, la atención en los detalles y la comprensión, cuando miran una película por ejemplo varias veces, en cada una de éstas descubren más cosas, primero se fijan en el contexto general, después ponen atención a los personajes secundarios, a escenas que no notaron la primera vez, etc., y cuando han logrado memorizar diálogos o secuencias quieren asegurarse de que lo han hecho bien comprobando nuevamente la misma proyección. Lo mismo pasa con los libros y canciones.
Si notas que tu hijo hace mucho esto, no le interrumpas el proceso, déjalo que mire cuantas veces sea necesario para él o ella, cuando por fin pida cambiar de actividad tú misma notarás que es porque ya ha cumplido con lo que necesitaba y esto es un avance. Al contrario, puedes contribuir a este proceso con juegos y retroalimentaciones.
Ahora, si aún así notas que su comportamiento es poco usual nunca estará de más la opinión de un pedagogo o terapeuta infantil.
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