El paladar hendido es una alteración congénita que provoca el paladar no se cierre correctamente durante el desarrollo embrionario. Puede aparecer de manera aislada o como parte de un cuadro sindrómino, de la misma manera puede darse solamente la fisura palatina o estar acompañado de labio leporino, nombre que se da cuando el labio superior no termina de cerrarse ocasionando una abertura que puede ir desde mínima hasta llegar a deformar también la nariz.
Las causas pueden ser múltiples, alguna alteración genética, provocada por medicamentos o enfermedades de la madre durante la gestación. Esa alteración se da desde los primeros meses de embarazo por lo que un bebé que nace con paladar y/o labio fisurado ha pasado así casi toda su gestación.
Existen aún muchos debates sobre los tiempos y procedimientos que se deben llevar para corregir estas anomalías, cuando el bebé presenta el cuadro completo de labio y paladar hendido es posible identificarlo desde una ecografía 3D, sin embargo esto no será posible si solo se trata de paladar, dando una sorpresa al nacimiento.
Los principales problemas que acompañan los casos de labio y/o paladar hendido son; poca o nula capacidad de alimentarse por su cuenta, problemas al hablar, defectos en la dentadura, broncoaspiración y recurrentes infecciones de lasa vías respiratorias.
Usualmente lo primero en corregirse es el labio ya que se busca que puedan alimentarse lo más pronto y apropiadamente, esta cirugía se hace incluso en recién nacidos lo cual puede hacer la recuperación más fácil en esta etapa donde el bebé depende totalmente de los cuidados de los padres.
Como segunda etapa viene el cierre del paladar que puede ser por partes o en una misma sesión, todo dependerá de la gravedad del problema y del criterio de los médicos.
Cuando el niño es operado ya a una edad más consciente la rehabilitación puede ser un tanto más cansada pero no imposible, sabiendo sobre la funcionalidad e importancia de la misma debemos estar al pendiente de ellos y darles la mejor calidad de vida posible.
La cirugía es solo un paso que dar en la rehabilitación de estos pequeñitos. No dudes dirigirte a tu pediatra quien te orientará mejor sobre el especialista a consultar quienes por lo regular se componen de un grupo inter disciplinario que va desde el pediatra, cirujano maxilofacial, genetista, foneatra, psicpologo y odontopediatra.
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