Seguimos hablando de aves exóticas. Hoy le toca a el loro Forpus Coelestis. Es una de las subespecies que podemos encontrar dentro de los Forpus que, como os comentamos previamente, son loros pequeños que provienen de Sudamérica. Esta subespecie, concretamente, suele encontrarse en Perú y Ecuador.
Dentro de los Forpus (y el desconocimiento que existe hacia ellos) es una de las variedades que podemos encontrar más comunmente y, por tanto, la más conocida. Tienen el mismo carácter tranquilo pero intenso que presentan otras variedades y son bastante territoriales de manera que debemos tener cuidado en caso de que metamos más de un ejemplar en la misma jaula.
Con respecto a su coloración es generalmente de color verde manzana practicamente en todo el cuerpo aunque presentan unas manchas de tonalidad azuladas en las sienes, en la zona supracaudal de las alas y en la rabadilla. El dimorfismo sexual es también claro en esta especie ya que las hembras no cuentan con dicha coloración azulada en el plumaje, siendo su tonalida de un verde bastante más uniforme. Por lo demás, los ojos son oscuros y no cuentan con anillo ocular mientras que las patas y el pico tienen una tonalidad de color hueso.
Son aves que, además, suelen criar con bastante facilidad de manera que puede resultar sencillo obtener descendencia en caso de contar con una pareja.