Rodajes desastrosos: Terry Gilliam, un gafe genial

Terry Gilliam no es un mal tipo, se le murió Heath Ledger en pleno rodaje de
https://www.youtube.com/watch?v=H2F1QleTmu0
“El imaginario del doctor Parnassus” y el resto del reparto masculino llegó a un consenso para repartir su personaje entre todos, una suerte de esquizofrénico giro de guion que les salió redondo.

Pero, en una serie de artículos sobre rodajes ruinosos el bueno de Terry siempre tendrá una plaza asegurada, no solo por éste, su último film, ni por la serie de infortunios que os voy a referir, sino por su cruzada personal

“El hombre que mató a don Quijote” que ha pasado a la historia como el rodaje mas gafado de la historia del cine.

Rodajes desastrosos: Terry Gilliam, un gafe genial 2

Vayamos por partes, Gilliam es el único componente norteamericano de los míticos Monty Phython, que fueron los responsables de aquel despiporre que dio en llamarse
https://www.youtube.com/watch?v=vVHhg67RVd4
“La vida de Brian”, cuando cada miembro del grupo emprendió su camino Terry Gilliam se decidió a trasladar su imaginario visual a la pantalla, él será muchas cosas, pero no cabe duda de que quizá se trate de uno los mejores directores artísticos del cine internacional.
brazil
Pero él no se conformaba con eso y quería dirigir, aunque las cosas no comenzaron bien, en 1985 rodó

Brazil (a mi gusto su mejor película), una ida de olla de proporciones míticas que dejó boquiabiertos a los productores porque, supuestamente, se le estaba poniendo a prueba para un tipo de cine convencional.

El disgusto de Gilliam fue inmenso porque decidieron hacer un “corto y pego” con su film, desmontándolo y destruyendo su concepto original, esto hubiera sido un desastre porque, con los años, la película ha ido ganando cartel como cinta de culto, menos mal que en el último momento Robert de Niro se apiadó de él y le echó una mano intercediendo ante el estudio.
munchausen
Quedó fichado, pero con su prestigio mas o menos a salvo, por eso se decidió volver a confiar en él para un film de gran presupuesto

Las aventuras del barón Munchausen, que tenía una trama que le venia que ni pintada al dedo, y ese fue precisamente el problema, tenía a su mano un gran presupuesto y una historia que se prestaba a todo tipo de innovaciones técnicas, sobre todo en su especialidad: el vestuario y en los decorados.

Hizo, y rehízo, mil veces los decorados, diseñó maquetas imposibles y las volvió a tirar, esto hacia que el presupuesto se disparara de forma espectacular, es como si a un niño le dices que puede escoger, él solo, entre todos los dulces de la pastelería, por eso al final llegó el estropicio, de hecho esta película se convirtió en el mayor fiasco económico de la década de los ochenta.
el rey pescador
La jugada de “El rey pescador” (1991) le salió bien, esto le trajo un periodo de calma e hizo que renovara sus deseos de seguir haciendo un cine personal y libre, quizá esos anhelos de libertad fueran los que le hicieron decidirse a rechazar dirigir dos de los mayores éxitos de taquilla de los 90
https://www.youtube.com/watch?v=vBXBtORI7pE
Braveheart y

Forrest Gump (sabe Dios la que hubiera armado con estas dos joyas del cine)
miedo y asco en las vegas

Miedo y asco en las Vegas (1998) es una película rara, siempre lo he pensado, pero Gilliam hizo un trabajo digno y el público no respondió mal a su propuesta visual, de todas formas, en este film la mala suerte se disfrazó en esta ocasión de injusticia, pues tuvo que firmar el guion conjuntamente con un guionista, despedido anteriormente, que no había participado en la nueva restructuración.

Se comenta con fuerza en Los Ángeles que Gilliam vuelve al ataque con la intención de recuperar su viejo sueño de estrenar “El hombre que mato a don Quijote” y me imagino que en la meca del cine se hayan puesto a temblar (o quizá a frotarse las manos) recordando que hace diez años enviaron a este hombre a España a localizar exteriores y ¡vive Dios! que los localizo: en pleno desierto de los Monegros, una zona semidesierta en la que prácticamente no llueve y completamente alejada del mundanal ruido.
el hombre que mató a don quijote
El problema fue que con el primer golpe de claqueta cayó el mayor aguacero que se había visto por aquellos lares desde hacía un siglo, por lo que se rompió la línea de continuidad dado que no quedó sano ni siquiera un guijarro, al haberse disuelto todo con el agua, por si esto era poco a alguien se le “olvidó” decirle al bueno de Gilliam que a pocos kilómetros estaba la base aérea de Zaragoza con lo que cíclicamente volaban aparatos a reacción que dejaban impresionantes estelas en el cielo difíciles de justificar en el Siglo de oro.

Vanessa Paradis, ni siquiera llegó a pisar el set y Johnny Deep, gran amigo del director, se dio cuenta enseguida de que sucedía algo grave y que pronto todo se iría al garete, aunque Gilliam, ajeno a todo esto, disfrutaba como un niño con sus maquetas y sus animadas conversaciones con los pocos habitantes de la zona.
jean rochefort
El golpe de muerte le dio Jean Rochefort, que iba a interpretar a Don Quijote, que a pesar de haber acogido el proyecto con mucho interés se dio cuenta enseguida de que ya estaba muy mayor para esos trotes, de hecho sufrió una hernia discal que, en menos de un mes, le hizo imposible subirse al caballo.
el hombre que mató a don quijote
El resto llegó de corrido, el dinero se había acabado y pronto llegaron los acreedores que lógicamente confiscaron el guion del film, al final Terry Gilliam, muy apenado, se tuvo que rendir y regresar de nuevo a su país con las manos vacías.

Por último, comentaros que se pensó en él para dirigir la primera parte de Harry Potter, las carcajadas en el cuartel general de la Warner debieron ser apoteósicas, pero de cara a la galería se dijo en rueda de prensa (de forma muy cortés): no, que puede asustar a los niños.

4.5

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.