Si el estrés del trabajo, el estar en la cocina, la casa o la familia hace que los signos de cansancio dejan huella en tu rostro aquí te doy una solución sencilla, rápida y barata. Pon en un bol agua mineral (ya que no contiene cloro, cosa que el agua del grifo tiene y perjudica la mezcla) con arcilla blanca, realiza una mezcla con ambos ingredientes hasta crear una masa de textura parecida a una crema. Aplica el preparado sobre la cara y cuello evitando ponerlo en el contorno de ojos y cuando empieces a notar que la mascarilla se queda seca y escamosa, retíralo y lava tu rostro con agua fría. Esta mascarilla los que hace es afinar el cutis, eliminar células muertas y devolver el esplendor natural a la piel. Si luego aplicar sobre tu cara una hidratante, el poder de absorción será mayor que si no hubieras puesto mascarilla