Por falta de información, economía o incluso desidia, muchos de los productos que usamos para nuestra higiene y/o cuidado personal no son reemplazados como se debería y es que usualmente nos basamos en la opinión superficial de «se ve bueno» aunque no sepamos lo que hay debajo del material tanto suciedad como bacterias y que están en constante contacto con nuestro cuerpo, terminando por hacer más daño que cumplir la función para la que han sido creados, así que toma nota:
Cepillo de dientes
El cepillo de dientes debe renovarse cada 3 meses aprox. E inmediatamente después de pasar por alguna infección o problema bucal, esto se debe al constante contacto con bacterias en nuestra boca, la existencia de humedad sobre la superficie del cepillo y la falta de ventilación que pueden propiciar un foco de problemas más que de soluciones.
Cepillo de cabello
Pocas veces pensamos en cambiar nuestro cepillo o peine, incluso usamos el que la abuela nos heredó, aún así se recomienda hacer una renovación al menos una vez al año asegurando tener un material de calidad para nuestro cuidado.
Toalla de baño
Sobre todo por la humedad que puede guardar después de su uso es que se recomienda reemplazarla por una toalla limpia después de 3 usos aprox. Y por una nueva en cuanto ésta se sienta lisa y desgastada, máximo 2 años.
Toalla de manos
Dado a que su uso es aún más frecuente que la toalla de baño, la acumulación de bacterias es también mayor, así que se recomienda hacer el cambio diariamente.
Rastrillo/rasurador
La duración del rastrillo dependerá del uso que se le de, tanto los hábitos de guardado como la cantidad de vello y zonas a rasurar, pero en promedio se recomienda cambiar de cuchilla cada semana.
Si acostumbras dejar tu rastrillo en la ducha, revisa que las cuchillas no estén oxidadas antes de usarlas.
Esponja de baño
La durabilidad de tus esponjas de baño dependerá mucho del cuidado que les des, mientras más húmeda quede mayor será el daño que reciba, por lo tanto es importante que éstas se sequen después de la ducha. Cambia de esponja una vez al mes si cuentas con familia numerosa, o cada dos meses si es de uso personal.
Esponjas y brochas de maquillaje
La vida de estos productos suele ser de un mes, sin embargo podemos darles mantenimiento en el inter lavando con jabón neutro o de bebé cada 2 o 3 usos.
Tapete del baño
Aunque el tapete o alfombra de baño no es un producto de higiene personal, sí tiene gran importancia al mantener un contacto con nuestros pies, por lo tanto hay que secarlo diariamente después de cada ducha ya que la humedad se queda acumulada proliferando hongos y bacterias, lavar una vez a la semana y dependiendo el material, sustituir por uno nuevo cada cierta cantidad de meses.
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