Aunque somos seres sociales, toda y cada una de las personas requerimos nuestro propio espacio, ya sea al relacionarnos con la familia, la pareja, un grupo de amigos/compañeros o incluso los mismos hijos puede tener sus momentos abrumadores.
El principal detonante de una mala relación es la falta de atención a las propias necesidades, cuando olvidamos que necesitamos tiempo y espacio y dejamos que otras personas invadan nuestro mundo de manera voluntaria o no.
Si bien hay quienes tienen muy en claro esta línea divisora, no todos contamos con la misma consciencia hacia uno mismo pero es solo cuestión de tiempo para que nuestro cuerpo y mente nos griten que es momento de una pausa y tomar aire, si identificas alguna de las siguientes señales es muy probable que estés apunto de explotar y es mejor hacer algo al respecto.
Sigue leyendo; 10 cosas que nos pasan cuando vivimos con ansiedad
Estás de malas mucho tiempo
Sin causa «aparente» dese que despiertas pareciera que lo hicieses con el pie izquierdo.
Te sientes ansiosa
La ansiedad es algo difícil de explicar pero en simples palabras sientes como que no puedes controlar a tu cuerpo, además hay signos externos como hinchazón, comezón, tics, etc.
Se ha alterado tu apetito
Los cambios de humor también alteran tu forma de comer, ya sea en exceso o escasamente, si notas que algo ha cambiado pon atención.
Te sientes intolerante hacia los demás
Como dicen, se te está llenando el buche de piedritas, esto quiere decir que aunque lleves mucho tiempo «tolerando» alguna situación no puedes permanecer así por siempre.
Te sientes enojada
La falta de tolerancia comienza a hacer estragos y ya no solo por el presente, también te sientes molesta por cosas que ya pasaron pero claro, te han llevado hasta el punto donde estás hoy.
No sabes qué es lo que quieres
Entras en un estado de confusión, muchas veces es la culpa la que no nos deja ver por nuestras necesidades.
Te la pasas enferma
Tu cuerpo comienza a sufrir las consecuencias, sobre todo con malestares como gripa o infecciones estomacales, ya que las defensas del cuerpo de alteran.
Tienes pensamientos derrotistas
Comienzas a ver todo muy oscuro sin salida pues aunque tu mente te pide a gritos hacer algo al respecto, no siempre sabes cómo hacerlo (cuando estás dentro de una relación tóxica por ejemplo).
No te gustas
Tu autoestima se ve alterada también.
Quisieras salir corriendo
Y literalmente comienzas a soñar despierta con que tu vida fuera diferente.
Si has notado alguna de estas señales es hora de hablarlo con alguien de suma confianza que te ayude a ver las cosas un tanto más claras y tomar decisiones, a veces un simple cambio de rutina o establecer un time out son suficientes para romper la crisis y permitirte reorganizar todo.
