Os traigo un truco que seguramente sabréis, pero no está de más recordarlo.
Es algo muy simple, simplemente, tenemos que pelarlo y partirlo por la mitad, quidandole la tirita de en medio, de ese modo, el ajo ya no picará.
Os traigo un truco que seguramente sabréis, pero no está de más recordarlo.
Es algo muy simple, simplemente, tenemos que pelarlo y partirlo por la mitad, quidandole la tirita de en medio, de ese modo, el ajo ya no picará.