Las familias disfuncionales, son aquellas familias en las que el malestar y el dolor están siempre presentes. Son familias llenas de conflictos, donde el desarrollo se ve detenido.
En oposición a las funcionales, se caracterizan por presentar:
- Dificultades para adaptarse a los cambios. Son familias muy rígidas, que ante los mismos problemas, repiten las mismas soluciones ineficaces del pasado. No hay espacio para el cambio y el desarrollo.
- Negociaciones ineficaces de los conflictos. Por la misma rigidez, se dificulta llegar a nuevos acuerdos y consensos. Las interacciones entre los miembros están llenas de rencores. Se culpan unos a otros, o culpabilizan a una tercera persona por los problemas. No se tolera el desacuerdo, pero tampoco se logra un acuerdo donde todas las partes sean participes.
- Falta de intimidad. No se expresan abiertamente los sentimientos, ni se promueve el desarrollo de la autonomía. Hay poca comprensión del otro, desvalorización y poca empatía. No confían en sus propias capacidades, ni en la de los demás. La visión que poseen de la realidad es pesimista.
- Distorsión de los límites intergeneracionales. Los padres no conforman un sistema parental sólido, no se apoyan ni se sostienen entre sí. Los hijos son buscados muchas veces para ocupar el lugar de uno de los padres.
Las familias disfuncionales necesitan de ayuda externa para poder desenvolverse saludablemente; para cumplir con todas sus funciones, y otorgar a los miembros que la componen, seguridad y efecto.
Psicóloga~ Terapeuta~ Docente
La Licenciada Verónica M. Sargiotti Pieretto es Psicóloga especialista en Terapias Breves. Egresada de la Universidad Nacional de Córdoba en 2002. Profesora en Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba en 2004. Y Postgraduada en Psicoterapia psicoanalítica breve del Centro de Investigaciones Psicológicas en 2006.