Es una verdad que las mujeres siempre buscamos, si es que no es fantásticas, por lo menos presentables en todo momento. Y el momento de dormir no es una excepción. Descubre algunas de las últimas tendencias en la ropa de cama que harán que luzcas fenomenal además de bastante cómoda.
La ropa de cama ha ido evolucionando y cambiando con el pasar del tiempo, y al igual que en la moda las influencias de la sociedad dejan huella no sólo en el papel, sino que también hacen historia a base de tela e hilos.
Están ya lejos los tiempos en los que se utilizaban para dormir aquellos grandes, holgados y blancos camisones de mangas largas y que llegaban casi hasta los tobillos.
Los diferentes cambios en la sociedad, e incluso los diferentes roles que fue adquiriendo la mujer dentro de esta afectaron la manera en que las mujeres se vestían. Tras las llamadas revoluciones feministas en los años 20s y los 60s, la mujer fue cambiando su vestuario hacia uno más desenvuelto, más desinhibido y hasta más revelador, aunque en la mayoría de los casos manteniendo rasgos netamente femeninos como en el caso del color, la tela y los detalles.
Sin embargo, hoy la moda acepta sin mayores problemas la inclusión de estilos y prendas que eran propiamente varoniles al vestuario de las damas. Y la ropa de cama no es exactamente la excepción.
Es cada vez más frecuente encontrar prendas que si bien lucen prácticamente iguales a las prendas masculinas, unos cuantos cambios y algunos ajustes para que se amolden a la figura femenina las transforman en las actuales favoritas.
Los camisones que en realidad aparentan ser una camisa, o los camisones que aparentan ser polerones masculinos o incluso pijamas que lucen prácticamente iguales a los de varón, son los más comunes y que se encuentran marcando una tendencia, no sólo por la apariencia sino por la disponibilidad en tallas grandes y la comodidad que estos ofrecen.
Otro plus extra en estos modelos es que sacan a relucir aquellas curvas que usualmente resulta difíciles de lucir mientras se ocultan algunas gorduras o zonas que no queremos sacar a relucir.
En el mercado encontrarás varias propuestas de estas prendas de inspiración varonil, pero que en cuerpo de una dama resultan bastante provocadores sin caer en el exhibicionismo. Si tus piernas son tu mejor atributo, aprovecha los modelos similares a camisas o aquellos que aparentan ser la parte superior de un pijama de varón.
En cambio si lo que quisieras resaltar es la parte superior de tu cuerpo los pijamas enteros son tu mejor opción, tanto más si poseen el cuello en V para crear un efecto visual que agrande la parte del busto.
Así que si has pensado en renovar tu ropa de cama y gustas de algo cómodo y actual, no dejes de probar esta nueva tendencia dentro de la moda.