En los tiempos de nuestras abuelas, aún de nuestras madres, los niños se clasificaban como inquietos, desobedientes o muy callados, sin embargo en nuestros días, se ha estudiado más sobre las distintas personalidades de un menos para tratar así de brindarles una atención educativa acorde a sus necesidades.
De esta manera han surgido un sinfín de escuelas especiales, que van desde contar con grupos reducidos, educación bilingüe, hasta esquemas educativos personalizados de tiempo completo.
Si notas que tu hijo tiene alguna cualidad distinta o ha sido diagnosticado con algún tipo de déficit o aptitud más allá de lo que correspondería a su edad, es buen momento para que busques una escuela especial.
Las escuelas especiales son aquellas que ayudan a niños fuera de lo ordinario, con necesidades especiales ya sea en cuanto a atención, a personalidad, a aptitudes, pero también para trastornos más específicos como mentales o físicos, ya que todos tienen derecho a la educación.
Inclusive incorporar a nuestros hijos a una escuela especial les ayudará como parte de su terapia cognitiva y de estimulación, les ayudará a integrarse a la sociedad y a desarrollar sus habilidades pero a un ritmo y con l atención que requieren ya que aunque ciertas escuelas ordinarias cuentan con planes para alguno que otro caso de niños especiales, no están del todo capacitadas y esto puede perjudicar más al niño que ayudarlo.
Si te encuentras en la búsqueda de una escuela especial, deberás hacer una ardua labor de investigación, desde el método de enseñanza que utilizan, qué servicios proveen a los niños y padres, pues la relación con el tutor debe ser primordial para dar seguimiento de los avances del niño, así como revisar que cuenten con las instalaciones necesarias.
Tu instinto como madre es muy importante en todo momento, desde para detectar algún problema o requerimiento especial de tu hijo, hasta para encontrar el lugar adecuado para su atención.
