Toda madre sabe que a pesar de vivir múltiples achaques durante el embarazo, una vez que tenemos al bebé en nuestros brazos hay cosas que simplemente no se pueden dejar de extrañar, aunque hay para quienes la maternidad inicia hasta que el bebé ha nacido, hay quienes juran que desde la concepción una mujer se convierte en madre, sin embargo en lo que ambas partes están de acuerdo es que cada etapa nos marca de manera diferente y si bien el realmente poder disfrutar a nuestro bebé y dejar de imaginar «cómo será» es algo inigualable siempre habrá cosas por las que desearíamos regresar el tiempo atrás.
Dormir cuando tienes ganas
Cada embarazo es muy diferente y personal, incluso entre la misma madre que tiene más de un hijo cada embarazo es distinto, sin embargo hay similitudes en algunas situaciones, por ejemplo el sueño es algo que caracteriza a la mayoría de las embarazadas y si bien a veces es difícil conciliarlo por calambres o la misma panza, una vez que tienes a tu bebé extrañas esas siestas que a pesar de todo podías dar cuando lo desearas.
Comer todo lo que quieras
Aunque dicen que los antojos son solo pretextos, lo que es cierto es que el metabolismo está un tanto más acelerado durante el embarazo y esto ayuda a procesar mejor los alimentos, además de que digamos que socialmente es «aceptable» dejarse consentir en esta etapa.
Que todos te consientan
Las embarazadas despertamos ese sentimiento de protección y ternura en la mayoría de la gente, quizá al saber que se está llevando con una vida en el interior, pero sea como sea los mimos nos tocan a nosotras.
Ser el cetro de atención
Entras al cuarto y todos los presentes te preguntan cómo te sientes, tocan tu barriga, te acercan en asiento…pero una vez que el bebé ha nacido dichas atenciones se van sobre él lo que se extraña mucho.
Cargar al bebé con las manos libres
Aunque la barriga de embarazo es muy pesada, va creciendo poco a poco lo que te da la pauta de acostumbrarte, además de que el mayor peso está entre tu espalda y cadera, partes diseñadas para soportar más peso, en cambio cuando sale son tus brazos los que hacen el trabajo, además de esto mientras el bebé está en la barriga puedes tener las manos libres y cuando debes cargarlo sin duda extrañas esa libertad.
Sentir los movimientos del bebé
Ya como algo más íntimo, una vez que has sentido al bebé moverse dentro de ti nunca dejas de imaginar y extrañar esa inexplicable y bella sensación.
Sentirte acompañada
Mientras estás embarazada todo el tiempo eres una con tu bebé y aunque aún nacido sigue siendo tu bebé y necesita estar muy cerca de ti no hay como tenerlo dentro de tu propio cuerpo.
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