Hay flores que son muy demandadas por su belleza, vistosidad y aroma. Entre ellas tenemos los claveles, que junto a las rosas, constituyen una de las flores más apreciada por los cultivadores y por los diseñadores de jardines por su amplia gama de colores y vistosidad.
Aunque se pueden cultivar en todo el mundo prefieren los climas templados por lo que generalmente se cultivan comercialmente en invernaderos. Sin embargo esto no significa que no podamos disfrutar de estas hermosas flores en nuestro jardín pues si reciben los cuidados necesarios podemos admirar durante todo el año un jardín lleno de claveles.
La planta de clavel es perenne y del tipo leñosa, con hojas delgadas y alargadas. Sus flores pueden presentarse en grupos que varían de 2 a 5 de en número y pueden ser de tamaño estándar, grande o mini. Las flores presentan una amplia variedad de colores: rosadas, rojas, matizadas, blancas y fucsia entre otros colores.
El clavel es una planta que puedes cultivar tanto en maceta como en el jardín y en ambos casos para que prospere saludable se requiere de un suelo rico en nutrientes y con excelente drenaje.
Cómo cuidar los claveles en maceta
La planta de clavel requiere de algunos cuidados para que pueda prosperar y crecer ofreciendo hermosas flores que cautivaran a quienes los contemplen. Si deseas cultivarlos en maceta toma en cuenta los siguientes consejos:
- Antes de colocar la tierra en el macetero, pon una buena cantidad de piedras o guijarros, también puedes usar grava, en el fondo del recipiente; así aseguraras un buen drenaje del agua al regar.
- Aunque las plantas adultas no requieren de un macetero de gran tamaño, es recomendable trasplantarla a otro recipiente si observas que las raíces comienzan a crecer por la parte inferior del macetero. La época ideal para el trasplante es en la primavera.
- Ubica el macetero o jardinera en un sitio con buena incidencia de sol y de luz natural para que la planta crezca en toda su extensión y pueda dar la mayor cantidad de flores en el año. Recuerda que aunque necesita de abundante sol, la planta de clavel crece en óptimas condiciones en un clima templado, no mayor de los 24°C de temperatura ambiental.
- Debes usar una buena tierra rica en nutrientes y con características de suelo calcáreo. Se recomienda abonar con regularidad la tierra, sobre todo en época de floración, para mantener en óptima concentración los nutrientes requeridos por la planta. Te sugerimos utilizar un fertilizante líquido especial para plantas con flores. También es importante tener en cuenta que una vez que la flor en la planta se marchita, es bueno cortarla para que broten más y así siempre tendremos plantas floreadas.
- Al regar recuerda que no debes anegar la tierra, esta planta necesita de riego frecuente sobre todo en verano y primavera pero con moderación y evitando encharcamientos.
- En cuanto a podar o no la planta, sólo debes hacerlo para retirar las hojas secas o dañadas por lo que no es necesario un poda frecuente. Lo que si te sugerimos es que cambies de ejemplares cada 3 o 4 años ya que las plantas jóvenes se ven más frescas y frondosas que las que ya tienen algunos años y ello redunda en la vistosidad de las plantas y de las flores.
En general la planta de clavel no requiere de mucho cuidado y es muy indicada para aquellas personas que se inician en el oficio de la jardinería. Aunque generalmente no es atacada por plagas, debes estar atenta a los pulgones y lo ácaros que pueden dañarla.
Variedades de claveles
El clavel es una flor bastante resistente y una vez cortada aguanta bastante tiempo, por ello es muy popular en arreglos florales. Dado que es muy apreciada su flor, se han cultivado diversas variedades de plantas de clavel, todas pertenecientes al género Dianthus. Entre las más cultivadas tenemos:
El clavel común
Conocida con el nombre científico de Dianthus caryophyllus. Es la más comúnmente cultivada, dando unas flores grandes y de colores que abarcan desde el rojo, moradas, amarillas, blancas y matizadas.
Clavel chino
Su flor es de mediano tamaño y sus hojas son un poco más anchas que las del clavel común. Da unas flores preciosas de colores intensos que contrasta con el bajo tamaño de la planta.
Clavel del poeta o Dianthus barbatus
Una de las más apreciadas y vistosas flores de claveles por sus colores intensos, sobre todo las bicolor.
Clavel turco
Generalmente se planta en maceta ya que es de pequeño tamaño la planta. Sus flores son pequeñas y de tonalidad amarillo a naranja.
La planta de clavel no sólo nos brinda hermosas variedades de vistosas y delicadas flores en el jardín, sino que también nos permite componer excelentes arreglos florales que soportan el paso del tiempo muy bien.
La floración del clavel puede ocurrir varias veces al año, lo cual la hace ideal para cultivar si deseas disfrutar de un hermoso jardín con flores y además que emanan un exquisito aroma. Por si fuera poco las flores se pueden presentar en una sola unidad o en parejas, llamadas también claveles dobles, lo cual es una característica muy apreciada por los floricultores. Otra característica que añade interés a esta planta es el hecho de poseer tantas variedades de tamaños y colores de flores, lo cual es muy valorado por los que trabajan en arreglos florales.
Algunas personas atribuyen significados al hecho de obsequiar claveles. Según dicen el color de la flor tiene un significado. De acuerdo a esto, el clavel de color rojo está relacionado al amor romántico y puro, el clavel blanco se vincula con ingenuidad e inocencia, el clavel rosado con la amistad sincera.
Lo cierto es que sin importar el color, los claveles son flores muy apreciadas para la decoración de eventos como bodas y fiestas de gala, así como para obsequiar en arreglos florales. Cultiva plantas de clavel si deseas un jardín siempre floreado y sin mucho esfuerzo. Con ello te sentirás relajado al disfrutar de tan hermosas y duraderas flores en tu hogar.