Cuando las series españolas dejan de jugar a imitar a las americanas, pueden salir productos, como Frágiles, que conectan fácilmente con los espectadores y que además tienen tintes y argumentos muy de verdad, que se alejan de la mediocridad, ofreciéndonos un buen resultado a nivel de calidad.
Frágiles es una serie de televisión española basada en el drama médico.
Narra la vida de Pablo, un peculiar fisioterapeuta que utiliza métodos más propios de un psicólogo para curar a sus enfermos. A pesar de que la ficción constaba en principio de una única temporada de ocho episodios.
En cuanto a su método de filmación, la comedia está rodada en su totalidad en escenarios naturales y no cuenta con diálogos definidos.
Otra cosa es el resultado en la variable del éxito: si Telecinco, la tratase como debiera, sin utilizarla para contrarrestar shares y datos de audiencias mayores de otras cadenas, y la ofreciese como es debido, sin tantos cambios de día ni de horarios, quizás se daría cuenta de que el público español es lo suficientemente adulto y bueno como para seguirla, haciendo funcionar una serie que tiene motivos más que fundados para poder triunfa, cómo le ocurre Frágiles, de la mano de Santi Millán, Elia Galera, grandes del cine español donde los haya.
Sin embargo, cuesta pensar que una chica que tan solo ha conseguido tocar la mano de su madre y su fisioterapeuta como muestra de cariño, llegara a tener una relación sexual. Veremos qué explicación dan a esto, si es que la dan, porque aparte de que los argumentos lleguen, que lo hacen, estos deben ser lo más creíbles posible… al menos en esta serie tan «frágil», que demanda el máximo de realismo posible.
En el inicio de temporada, retomamos la acción de la serie un año después del atropello impresionante a Pablo y de que su mujer Ana despertará del coma. Él (Santi Millán) abandonaba su domicilio para instalarse, por todo lo alto, en casa de su amigo Mario.
Desde luego que, con semejante golpe, está claro que el protagonista tiene un don muy especial, porque al año no le queda ni una cojera ni nada que se le parezca. Este sería otro hecho discutible. al que podrían haberle dado un protagonismo, de recuperación, a lo más puro estilo Fisioterapeuta en duros momentos de recuperación.
También deberían contarnos, la historia de la «ruptura» de la pareja formada por Pablo y Teresa, nos cuentan las cosas a medias, donde podrían, sin lugar a dudas, haberles dejado madurar la relación, pero me da a mí, que esconden un reencuentro con el que volver a retomar la relación, la pareja, tiene todavía mucho que decirse.
No veo lógicos, los juegos entre Mario, Teresa (quienes ahora son pareja) y Pablo, creo que no pinta muy bien el argumento, a mí, por lo menos, no me convencen.
Aún así, cada semana, le estoy dando una oportunidad, porque creo en el producto, y es un producto, que bien cuidado puede tener muy buenos resultados.