Desde la edad media, la eufrasia se utilizaba para refrescar e iluminar la mirada. Si tienes una de esas mañanas en las que no puedes ni abrir los ojos ya que tu noche fue dura, bien porque trasnochaste estando de fiesta, tienes bebes y no te dejaron pegar ojo, o estuviste llorando y tus ojos están hinchados, te damos un remedio de lo mas antiguo para que no se note nada, por el día tu mala noche.
Debes poner a una taza y media de agua hirviendo dos cucharadas de hojas secas de eufrasia. Deja este preparado reposar unos 15 minutos. Fíltralo y ponlo en un frasco en la nevera guardado. Cuando se haya enfriado, empapa dos discos de algodón o gasitas en el preparado y ponlo sobre los ojos. Túmbate relajada durante 15 minutos con el empasto sobre ellos. Cuando te los quites tendrás los ojos y la cara como nuevos
