Dormir es necesario para autoregular y reparar el desgaste al que nuestro organismo es sometido durante la vigilia, durante el sueño eliminamos toxinas, reparamos células y consolidamos la memoria, no dormir tiene consecuencias sobre nuestra salud, rendimiento y claro está; nuestra belleza.
Es por eso que el sueño es sumamente importante, aunque con las exigencias de la vida moderna lo hemos dejado de lado, pero dormir es vital para el funcionamiento de nuestros órganos, ayuda en la relajación de nuestro cuerpo, incluso a regular el metabolismo; la forma y el cómo dormimos se refleja en nuestro estado de humor, nuestra imagen e incluso personalidad.
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Posición fetal
Esta posición al dormir hace referencia a la postura que toman los bebés en el vientre materno, es recostada de lado con las piernas dobladas hacia el pecho. Refleja que eres una persona tímida y sensible, te cuesta trabajo confiar en los demás pero una vez que lo haces te desenvuelves muy bien. Tu círculo social es pequeño pero integra a quienes realmente te interesan.
Posición longeva
Esta posición se toma cuando duermes sobre uno de tus costados, con las manos dobladas hacia tu cara y una pierna extendida y otra doblada. Dormir en esta postura connota que eres una persona segura y de mentalidad abierta, te gusta probar cosas nuevas y tomas decisiones al instante.
Posición de abrazo
Si necesitas dormir abrazando tu almohada o algún peluche, entonces eres una persona muy cariñosa, sensible y abierta.
Posición de soldado
Esta postura es una de las más comunes al recostarse aunque poca gente la adopta para el sueño profundo, sin embargo si eres una de ellos entonces determina que eres una persona de caracter firme, disciplinado y muy objetivo.
Posición boca abajo
Dormir sobre tu estómago con los brazos y piernas relajados representa una personalidad libre y alegre, regularmente te sientes en confianza aunque muy receptiva a las críticas.