Son muchas las personas que desean un tono de piel mucho más pálido pero lo que no saben es todo con lo que hay que lidiar cuando es así.
- No puedes salir a la calle sin bañarte con bloqueador solar: Aunque es un hábito que debemos adoptar todo el mundo, la realidad es que al tener la piel tan blanca no puedes darte el lujo de olvidarlo o pagarás las consecuencias.
- Tu cara no sale en las selfies: Y ni hablemos de usar el flash, mientras otras personas se exceden con los filtros para destacar o aminorar ciertos rasgos, cuando se tiene una cara tan pálida es casi inevitable salir así…
- Parece que usas medias siempre: El color de tus piernas es tan pálido que a menudo al usar falda o short pareciera que traes medias de otro color pero no, sólo son tus piernas.
- Tu piel solo conoce dos extremos de color: Así es, tu piel normalmente es pálida y al broncearse sólo se torna rojo intenso para después regresar al pálido de siempre, lograr un bronceado dorado es algo que existe sólo en sueños.
- Parece que tienes piel radioactiva: Además de todo el reflejo de la luz ya sea artificial o del sol te juega una mala broma haciendo que tu piel tenga ese destello extraño sobre todo en las fotos.
- Debes cuidar tu maquillaje: Ya sea en crema, polvo o bb pareciera que el tono más pálido sigue siendo muy oscuro para ti lo que te lleva a hacer tus propias mezclas o lucir un poco extraña a la hora de maquillar tu rostro.
- Y no hablemos del uso de tonos oscuros ya que la línea es muy delgada entre lucir un look sofisticado y uno como si fueras a montar un show satánico dado al contraste de tu pálido color de piel.
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