Una exquisita travesía por los paisajes riojanos, bodegas y fincas que derrochan sabores, las Sierras de Fátima y los buscadores del oro. Una ruta que nadie conoce, turismo rural, ecológico y muy consciente, este hermoso viaje empieza a vislumbrarse en la comúnmente llamada costa riojana, justamente en la ruta provincial número 75, allí un circuito de 8 productores viñateros y que elaboran vinos caseros en el Cordón de Velasco, los Molinos, Anillaco, San Pedro, Santa Vera de la Cruz.
Estos pueblos son pequeños y no sobrepasan los 800 habitantes, en este natural paisaje se fabrican los vinos malbec «caseros», torrontes blanco y vinos dulces cocidos con técnicas ancestrales.
En esta zona riojana además de los bellos paisajes totalmente poblados de olivares, viñedos y de nogales al pie de las sierras el turista empezará un viaje atrapante, las rutas arqueológicas te llevarán al sitio arqueológico Pucará del Hualco, observaremos las ruinas diaguitas y los vestigios acerca de cómo eran aquellos días que iluminaron ese pasado.
Se encuentra situado en el departamento de San Blas de los Sauces, está dispuesto en una laderas de la quebrada de Hualco, desde este lugar se podrá apreciar unas vistas panorámicas impresionantes, se observarán los picos del valle Vicioso y el cordón que la separa de la provincia de Catamarca.
Un impresionante marco de montañas será el escenario perfecto para vislumbrar las ruinas del Pucará, restos antíguos de una ciudad con un estilo de fortaleza precolombina, es el certificado de cómo vivieron los pueblos de la región de Cuyo y el noroeste argentino.
Rutas y secretos bien guardados, se podrá practicar carrovelismo, este deporte que es consagrado en Barreal de Arauco, el impulso del viento como motor, impresionante y atrapante. Los muros del Pucará te observarán desde lo alto, una viaje hermoso y con mucha cultura.