Quitar el vello no deseado es cada vez más posible, gracias a la diversidad de productos y servicios que podemos encontrar, sin embargo no siempre tenemos la facilidad de optar por alguno ya sea por economía o simplemente no nos damos el tiempo para acudir a un spa o clínica y sabemos las contra indicaciones de usar rastrillo o cuchilla y aún cuando podamos adquirir un kit para depilación en casa, podemos salir alérgicas o irritadas por los componentes y es aquí donde vale la pena probar con lo natural.
Económico, seguro y amable con el medio ambiente, ¿te animas a elaborar tu propia cera para depilar en casa?
Vas a necesitar:
Azúcar, limón, agua, pocillo u olla de aluminio, recipiente de vidrio, abatelenguas, papel pellón.
De azúcar solo necesitaremos 2 tazas, puede ser azúcar blanca o morena, 6 cucharaditas de jugo de limón y 3 cucharadas de agua.
Coloca dentro de la olla los ingredientes, sin un orden específico, a continuación calienta a fuego medio y revuelve hasta que suelte hervor y baja la flama, mezcla una vez más y deja por unos minutos a fuego bajo hasta que se unifiquen los ingredientes en una pasta pegajosa.
Debes cuidar dos cosas; una el calor pues al caramelizarse el azúcar puede provocar quemaduras y otra es que no se reduzca demasiado ya que se endurecerá y no podrás manipularla para la depilación.
La pasta debe ser de tono dorado (no muy oscuro) y sentirse pegajosa, una vez que alcance este punto retira del fuego y deja reposar al aire libre.
Como va a estar recién preparada solo debes esperar a que enfríe un poco, o suficiente para que la toleres sobre tu piel, a continuación unta en dirección al vello con el abatelenguas, deja enfriar un poco más, (nunca que se endurezca demasiado), coloca el papel pellón por encima, éste debe pegarse también a la cera para permitirte retirarlo al jalar (contrario al crecimiento del vello).
Guarda la cera en un envase de vidrio que puedas calentar a año maría cada que lo vayas a usar para que la pasta se haga suave y puedas aplicarla.
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