Aceptémoslo, cuántas no hemos regresado o estado a punto de hacerlo (al menos una vez en la vida) con uno de nuestros ex, esto pasa normalmente cuando las cosas aún no han concluido del todo y hay añoranza, cuando terminamos por un simple enojo o capricho teniendo más historia por delante o cuando (también pasa), el hombre es un cínico y a pesar de todo y el punto y aparte sigue sin querer «dejarnos ir».
Ya sea porque él es el verdadero amor de tu vida o un acosador en potencia, estas son algunas de las señales cuando él ha regresado y anda melodeando por ahí. A veces lo hacen con buenas intenciones y por conservar algún tipo de «amistad» pero otras solo se trata de como decimos vulgarmente «chicle y pega» así que atentas para identificarlo.
Busca cualquier pretexto para contactarte
Sobre todo cuando habían perdido el contacto por mucho tiempo y de repente reaparece una y otra vez.
Pregunta a sus amistades por ti
Si tienen amistades en común ya los habrá invadido con preguntas sobre lo que has hecho, dónde estás y cómo estás…esto usualmente lo hacen antes de decidirse a entablar un contacto directo contigo pero seguramente te habrás enterado ya de su insistencia y curiosidad tan atípica.
Saca temas sobre ambos y sus recuerdos
Cuando hablan en lugar de enfocarse a cosas actuales no deja de mencionar momentos que pasaron juntos o a invitarte a recordar o bien que la pasaron.
Te pregunta por tu vida amorosa
Muestra celos y una especial intriga por si estás o has estado con «alguien más.»
Casualmente está en todas partes
De repente te lo encuentras en la plaza, el café, camino a tu trabajo, pareciera que es intencional su encuentro.
Es muy atento
Aún sin sugerir nada se porta muy atento y cariñoso, te mensajea seguido, pregunta por lo que has hecho y se interesa en ti «nuevamente».