Llega el verano. El sol brilla cada día más intensamente y las temperaturas aumentan. Es hora de ahorrar ropa y de ahorrar también en nuestra cocina. Nosotros te proponemos una lista de los mejores alimentos dietéticos para que puedas llevar un sencillo y saludable plan de alimentación, ahora que en verano las comidas tienen a ser más ligeras y frescas.
- La leche se encuentra en un lugar destacado dentro de este grupo de alimentos dietéticos, ya que es importantísimo tenerla presente todos los días. Está llena de calcio y es necesaria para los huesos y para una buena salud. Lo recomendable sería tomar un litro y medio de leche desnatada, bien sola, mezclada con café o con té. Un alimento básico, lleno de calcio también, que puede más o menos sustituirla es el yogur, bajo en calorías y muy beneficioso también para la salud. Gracias a los organismos vivos que encontramos en él, llamados probióticos, ayudamos a nuestro cuerpo a mantener un tracto digestivo saludable e incluso a adelgazar.
- Nada mejor para el verano como la gran variedad de frutas que empiezan a aparecer, como las fresas, las frambuesas, las moras y los arándanos. Dentro de este grupo, las fresas quizás sean las más comunes, pero también las que poseen una mayor cantidad de vitamina C, que ayuda a reducir posibles enfermedades cancerígenas y a prevenir infecciones del tracto urinario. Otra fruta a destacar son los mangos, que aunque desprenden calor son altas en antioxidantes y en potasio. Esto nos ayuda a mantener un sistema de defensas saludable, reparando el daño celular, y a regular la presión arterial y el ritmo cardiaco. Lo más recomendable sería comer cinco porciones de frutas al día, o añadirlas, sino, a las comidas o ensaladas.
- Entre las verduras, los tomates y los pimientos se encuentran en una situación ventajosa, llenos de vitaminas A y C y licopenos, ese poderoso antioxidante que les da color.
- Por último, y no menos importante, el agua. De hecho, se trata del elemento más esencial de todos. Ocho vasos de agua diarios para mantener el cuerpo hidratado y ayudar a funciones corporales como la digestión y el metabolismo son suficientes. También es saludable beber té, café y bebidas dietéticas. En cambio, los líquidos muy fríos obstruyen los vasos sanguíneos, así que siempre será mejor evitarlos.