Se ha comenzado a denominar Violencia Intrafamiliar (VIF), al tipo de violencia circunscrito al interior de una familia; sea esta: violencia física, violencia emocional o psicológica, abandono, ataque sexual, coerción económica; o cualquier tipo de acto violento llevado a cabo por parte de un integrante de la familia hacia otro integrante; este el primero compartiendo, o no, en la actualidad el mismo hogar.
Muchos autores distinguen tres factores causantes de violencia intrafamiliar:
- Falta de autocontrol. Las personas violentas tienen dificultades para controlar y reprimir sus impulsos agresivos; por ello hacen, lo que se denomina, un paso al acto.
- Carencia afectiva. Desde la psicología se sostiene que la falta o inadecuación de los afectos, de manera prolongada, eleva las posibilidades de que una persona sea agresiva.
- Incapacidad para resolver problemas de manera adecuada. Una persona agresiva, carece de los recursos “yoicos” (internos) necesarios para resolver dificultades de manera pacífica y controlada.
También suele asociarse a la personalidad agresiva, el abuso de alcohol y drogas; dado que estas sustancias desinhiben el control de los impulsos, facilitando la emergencia de la violencia intrafamiliar.
Psicóloga~ Terapeuta~ Docente
La Licenciada Verónica M. Sargiotti Pieretto es Psicóloga especialista en Terapias Breves. Egresada de la Universidad Nacional de Córdoba en 2002. Profesora en Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba en 2004. Y Postgraduada en Psicoterapia psicoanalítica breve del Centro de Investigaciones Psicológicas en 2006.