Ideal del Yo

El Ideal del Yo es definido por Jean Laplanche como un modelo (imagen idealizada) al que el sujeto intenta adecuarse. Desde el punto de vista psicoanalítico el Ideal del Yo se compone de mandatos e ideales paternos y sociales que recibimos desde la temprana infancia, y de los restos de un Yo propio infantil idealizado que afectarán, en mayor o menor medida, nuestro psiquismo.

Por su parte, la psicoanalista Karen Horney (quien desarrolló ampliamente el tema) distingue el Yo Real del Ideal del Yo -o Yo Ideal, postulando que le cabe a éste último la responsabilidad en la generación y mantenimiento de la neurosis, y al primero la esencia de quienes somos realmente.  La autora sostiene que el Yo Ideal es producto de la necesidad del ser humano de encontrar un refugio ante la angustia generada por la hostilidad del mundo exterior; el Yo Real es enajenado y despreciado en pos del Yo Ideal.

Una vez consolidado el ideal, existen tres posibles desenlaces:

1. El Yo Ideal se torna más auténtico que el Yo Real; la persona se identifica con el primero, se convence que él es ese Ideal.
2. Se advierten las diferencias entre ambos Yo, pero se persigue al ideal, la vida se torna una constante lucha hacia el perfeccionismo.
3. La persona se revela ante su ideal y se comporta exactamente como su opuesto.

El Ideal del Yo o Yo Ideal es una imagen exigente, falsa e irrealizable; imagen que esconde una carencia afectiva.