La mayoría de los psicólogos sostienen que el monto y la frecuencia en que experimentamos frustración es un índice del equilibrio emocional que poseemos, o no, los seres humanos. Por ello, uno de los rasgos que se observan a la hora de evaluar la madurez emocional de las personas, es la tolerancia a la frustración.
Las dificultades que se presentan en la cotidianidad causan en nosotros diferentes respuestas: enojo, rabia, angustia, dolor, irritabilidad, etc. La frustración aparece cuando no podemos afrontar, aceptar, resignar y/o solucionar las diferentes problemáticas que se suscitan a diario en nuestras vidas; cuando nos sentimos impotentes e incapaces de dar una respuesta adecuada. Cuando experimentamos frustración en forma recurrente, y/o de manera intensa, significa que nos encontramos ante aspectos inmaduros o no resueltos de nuestra personalidad.
La capacidad para tolerar la frustración, no sólo es un índice de salud; sino que su ausencia puede conducirnos a la violencia o la depresión.
Psicóloga~ Terapeuta~ Docente
La Licenciada Verónica M. Sargiotti Pieretto es Psicóloga especialista en Terapias Breves. Egresada de la Universidad Nacional de Córdoba en 2002. Profesora en Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba en 2004. Y Postgraduada en Psicoterapia psicoanalítica breve del Centro de Investigaciones Psicológicas en 2006.