Las brochas de maquillaje son partes esenciales de nuestro kit así que hay que tenerle el mismo cuidado que a nuestro maquillaje de alta calidad. El primer paso para mantener las brochas como nuevas es limpiarlas al menos una vez a la semana, lo ideal sería tres veces por semana pero pocas somos quiénes tenemos el suficiente tiempo. Para limpiarlas de manera profunda solo necesitas lo siguiente:
- Jabón liquido
- Aceite de oliva extra virgen (la marca no importa)
- Un plato
Sobre el plato pon dos cucharaditas de jabón liquido con otras tres cucharaditas de aceite de oliva, ahora talla tus brochas en contra del plato sin aplicar mucha fuerza. Verás como el maquillaje se ha caído por completo; al momento de enjuagar nunca pongas la brocha vertical con el pelo hacia arriba porque así la arruinarás más rápido (porque el agua entra en donde está el pegamento que mantiene unida la brocha), enjuagalas de manera vertical pero con el pelo viendo hacia el suelo. Una vez enjuagadas cuelgalas en un tendedero de la misma forma que las enjuagaste y ¡listo! tendrás unas brochas tersas y limpias.
¿Qué brocha debo lavar más seguido?
No debería haber una brocha preferencial ya que todas están expuestas tanto a las bacterias del rostro como las del aire pero la brocha de base líquida es la que recoge más bacterias así que si tienes un limpiar instantáneo de brochas úsalo inmediatamente cuando termines de usar tu brocha de base.
¿Cómo guardo mis brochas?
Hay muchas maneras divertidas de guardar tus brochas de maquillaje; puedes usar un vaso decorado por ti misma solo tienes que rellenarlo con bolitas de unicel y estará listo. Si lo que quieres es preservarlas aún mejor te recomiendo que uses los estuches de viaje; no dejas que se toquen entre ellas y conservan su forma original gracias a que están dentro de un compartimiento.