Una de las causas de que nuestras plantas tengan enfermedades es su dueño. A veces, por desidia, o por “precaución” aquellas cosas que nos servían en verano las continuamos haciendo en invierno. Y creyendo que nuestra planta está bien, el efecto resultante es radicalmente opuesto.
Una de las cosas que se hacen en verano es unir plantas en una misma zona para que la sequedad se mitigue, además de espolvorear con agua a fin de mantener esa humedad necesaria para que nuestras plantas se mantengan frondosas. Pues bien, si tenemos un clima benévolo primaveral y húmedo nuestras plantas pueden tener problemas y muy serios. Pero el problema no tiene que haber empezado aquí, quizá en el tiempo de poda hayamos sido descuidados con nuestras herramientas de poda, o bien tomamos tierra de nuestro jardín exterior para nuestros esquejes y futuras plantas.
Cabe decir que, respecto a nuestras herramientas de poda, han de permanecer bien afiladas, a fin de realizar cortes limpios y no provocar desgarros y heridas a nuestras plantas, así como también mantener estas herramientas desinfectadas de posibles “problemas” que más tarde veremos. Para esterilizar nuestras herramientas, bastará con diluir lejía con agua e introducir las partes que entren en contacto con nuestras ramas en ella. Acto seguido deberemos secarlas y tapadas de la intemperie existente.
Aunque piensen que esto es una tontería, es la mayor prevención existente de las enfermedades de nuestras plantas. Eso y también no querer ahorrar en tierra usando tierra que posiblemente tenga hogos y bacterias.
A continuación se describirán las afecciones más importantes en nuestras plantas.