Ponga las raíces sobre la piedra y envuélvalo todo con polietileno.
Cuando la planta ya tenga más o menos un año, sáquela de su maceta y limpie las raíces. Colóquelas alrededor de una piedra escogida previamente, que debe dejar que el extremo inferior de las raíces sobresalga. Envuélvalo todo con polietileno, dejando libre la parte superior e inferior de la planta. Póngalo en un tiesto sobre una capa de tierra y llene con arena.
Si todo el proceso va bien, al año siguiente las raíces se habrán ido engrosando. Habrá llegado el momento de cambiar el bonsái a un recipiente más adecuado, específico para este tipo de plantas. A partir de entonces siga con los cuidados habituales para los bonsáis.
Este tipo de cambio de cuenco o tiesto en estas plantas requiere una dificultad media.
Se requieren para el cambio: guantes, planta obtenida por semilla, piedra, una capa de polietileno, una maceta amplia, tierra, arena y un recipiente para bonsái.