Tomar una ducha pareciera algo tan inofensivo y por el contrario una actividad con mucho beneficios; sin embargo siendo algo tan rutinario puede estar siendo el pretexto para cometer errores que afectan nuestra salud y belleza; entre los más comunes se encuentran los siguientes:
Agua muy caliente
Ducharse con agua muy caliente propicia la flacidez muscular y la resequedad de la piel, aunque sientas confort al bañarte con agua caliente, lo mejor es hacerlo con una temperatura media.
Exfoliarnos demasiado
Si mientras te duchas utilizas productos abrasivos y además esponjas y cepillos, tu piel tu piel sufrirá prematuramente ya que no solo terminas con las impurezas y la suciedad sino que además acabas con la grasa natural de la piel que la protege y mantiene hidratada.
Ducharse varias veces
Si necesitas ducharte más de una vez no es conveniente que repitas exáctamente el mismo proceso minucioso de higiene ya que el cuerpo necesita su tiempo para regenerarse y digamos que demasiada limpieza no es bueno. Si has hecho ejercicio por ejemplo, basta con darte un buen enjuague o por el contrario si sabes que tendrás actividades extras por la tarde entonces que tu ducha de la mañana sea más superficial.
Productos perfumados
Los productos perfumados deben usarse con cuidado ya que podrían causar alergias o irritación precisamente por esos químicos que les adicionan.
Lavarse el cabello diario
Debes tener un calendario sobre el lavado de tu cabello o hacerlo cada tercer día para evitar que se reseque y maltrate.
No enjuagarse bien
Dejar restos de productos sobre el cuerpo o cabeza también es otro error, la piel no respirará debidamente y además pueden causar resequedad en la piel.
Rasurarse en la ducha
Aunque es muy cómodo rasurarse en la ducha, al hacerlo sin las medidas adecuadas reseca la piel y podemos cortarnos, si lo has a hacer que sea al final de la ducha para que los poros se abran u usando siempre un jabón o espuma.
No usar productos especializados
No debemos lavar la cara, el cuerpo o la zona íntima con el mismo jabón, cada zona de nuestro cuerpo necesita un producto especial.
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