Todos sabemos que los puntos negros son molestos y antiestéticos, que salen en la nariz y a veces se expanden hacia las mejillas, sin embargo para poder atacarlos como es debido debemos primero preguntarnos, ¿qué origina los puntos negros?
El nombre puntos negros, es una denominación común que se le ha dado a este padecimiento precisamente por el color que tiene, sin embargo este punto se origina por sebo o grasa en la piel.
Cuando hay un exceso de ésta se acumula en los poros rellenando los mismos y ante la acumulación combinada con factores ambientales como la contaminación, el humo y otros elementos la grasa se torna oscura.
Sinceramente todos estamos propensos a sufrir de este problema que como bien mencionábamos, no es motivo de alerta pues no significa ninguna enfermedad pero sí una alerta en cuanto al estado de nuestra piel, es decir, los poros pueden verse afectados por puntos abiertos o cerrados, los abiertos son los más comunes, se sitúan en la punta de la nariz, las mejillas y la frente, mientras que los puntos cerrados son incrustaciones más profundas y claras que pueden implicar un problema mayor como indicios de acné por ejemplo y los encontramos en todo tipo de zonas que van desde la cara hasta el pecho o la espalda.
La principal causa de los puntos negros como lo hemos planteado se debe al exceso de grasa en conjunto con los malos hábitos pues si acostumbramos llevarnos la mano a la cara o no limpiarla correctamente o desmaquillarla, el problema es más visible.
Así que hablemos de soluciones, en primer lugar busquemos un remedio interno, pues has de saber que la alimentación influye mucho en nuestra imagen externa y ahora sí que como dicen, según tu interior será cómo exhibas tu exterior, por ello si nos alimentamos saludablemente, la piel sentirá los beneficios estando más limpia y sana.
Cambia o mejora tus hábitos de higiene, limpia constantemente tu cara con toallitas húmedas y lava tu cara con jabones o productos neutros, puedes una vez a la semana utilizar productos desincrustantes y así prevenir o remediar los puntos negros.
Si el problema es muy severo acude con un dermatólogo o especialista en el cutis para que te haga la primer limpieza y de ahí puedes aprender el procedimiento en casa. Existen múltiples mascarillas limpiadoras que son simples de utilizar y sobre todo, no te duermas maquillada pues actos como estos son los que tapan tus poros.