A veces vamos a la peluquería y no nos damos ni cuenta de que no nos hemos puesto la ropa adecuada para luego quitárnosla y no deshacernos el peinado, más si cabe cuando vamos de boda y nos hemos hecho un recogido de mírame y no me toques, pulido y perfectamente diseñado. Lo ideal es que o bien la peluquera a la hora de darnos cita y le aclaremos lo que queremos (ya que si no le decimos el tipo de peinado, no es adivina) nos recomiende ir ese día ya perfectamente duchadas y con una camisa o chaqueta abierta para que a la hora de quitárnosla no lo estropeemos o nosotras nos demos cuenta.
Otra opción es que si ya hemos ido y no nos hemos dado cuenta, llegamos a casa y es hora de quitarse el jersey y no lo queremos estropear es ponernos una bolsa de plástico en la cabeza, tapando la nuca y todo el peinado, pillar la parte de delante con la boca y sacar el jersey en segundos. La capa de aire que se crea dentro de la bolsa impedirá que se mueva un pelo.
Te lo dice una experta en el tema