No solo de hierro se nutre la sangre. Hay otro componente crucial, sobretodo para la mujer: el ácido fólico. Tener unos buenos niveles antes y durante el embarazo es imprescindible para dar a luz un bebé sano
Este famoso ácido proviene fundamentalmente de las hojas de las plantas. Antiguamente no se sabía de la existencia de éste componente, pero se sabía que lo más sano para una embarazada o para quien quiera estarlo, era comer verdura a diario. Las hojas verdes de muchas verduras como la lechuga, las acelgas o las espinacas son una buena provisión. Importante es que se consuman crudas o poco cocidas, ya que la cocción destruye el ácido fólico.
No olvides incluir en tu dieta alimentos como la levadura de cerveza, frutos secos y legumbres, son una fuente inagotable de ácido fólico.
También hay algunas hierbas ricas en hierro que son fenomenales como la genciana, la milenrama, la ortiga muerta y la centaura son algunas de ellas. Mézclalas todas, haz una infusión y toma a diario dos tazas.
