Lo que se denomina síndrome del nido vacío, es una de las etapas que atraviesan familias y parejas, cuando los hijos han crecido y abandonan el hogar para formar el suyo propio.
Dos son los momentos que más desestabilizan a la pareja parental: el nacimiento del primer hijo y la partida de éstos.
Cuando nace el primer niño, la pareja pasa de dos a tres integrantes; los tiempos deben reacomodarse en función del recién llegado, y nuevos roles surgen junto a nuevas tareas que antes no existían. Una vez operada esta acomodación, no se necesitan grandes cambios con la llegada de otros niños; todo forma parte de un continuo desarrollo familiar.
El primer desequilibrio en este “continuo” sucede cuando por primera vez uno de los hijos decide irse, y la familia completa debe afrontar la pérdida que esto supone; al segundo lo conformará la partida del último hijo. La pareja parental vuelve a quedar sola como en un principio, y su felicidad dependerá de la adecuación que pueda realizar a este nuevo estado.
El síndrome del nido vacío refiere al proceso de aceptación y duelo que debe realizar la pareja, como parte inevitable de su ciclo vital familiar.
Psicóloga~ Terapeuta~ Docente
La Licenciada Verónica M. Sargiotti Pieretto es Psicóloga especialista en Terapias Breves. Egresada de la Universidad Nacional de Córdoba en 2002. Profesora en Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba en 2004. Y Postgraduada en Psicoterapia psicoanalítica breve del Centro de Investigaciones Psicológicas en 2006.