Puestas al azar sobre las páginas de un libro, muchas flores que despiertan en las personas recuerdos se han conservado para nuestra sorpresa durante años bajo la presión de otros libros entre dos papeles secantes. Se trata de otro sistema de secado muy sencillo. Se colocan flores y hojas y se ponen entre las páginas de un libro. Se colocan sobre él más libros o algún objeto pesado y a esperar. La primera semana, cada 24 horas, se cambia el papel secante. Así se secan más rápido y los vegetales mantienen mejor el color. El tiempo de secado depende del grosor de las flores y plantas, pero por lo general tardan tres semanas. Otra opción es adquirir una prensa, pero el proceso a seguir es el mismo que el explicado con anterioridad.
De todas formas podemos hacer prensas nosotros mismos con unos simples gatos de bricolage ejerciendo presión con dos tablas que contengan el papel secante y el vegetal deseado. Evidentemente estos resultados se orientas a cuadros y planos bidimensionales.