Cuando hablamos de hábitos y manías, es muy fácil criticar a los hombres pero la verdad es que las mujeres no somos perita en dulce, es solo que los estereotipos nos colocaron en una vitrina como muñequitas de porcelana pero la verdad es que somos tan humanas como ellos y también tenemos nuestros gustos culposos, rarezas, caprichos, aficiones y costumbres que todas nosotras sabemos pero ¿ellos lo sospecharán? ¿Con cuál te identificas?
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#1 Andar en fachas
Sí, así como pecamos de una vanidad extrema al momento de arreglarnos y andar en el trabajo. una reunión, una cita, etc., también podemos pasar al extremo opuesto en cuestión de segundos y la verdad lo disfrutamos mucho.
#2 Asaltar la nevera
A pesar de escucharnos decir una y otra vez «no bebas de la botella», la verdad es que en medio de la noche llegamos a hacerlo y no solo eso, sino que somos capaces de morder por aquí y por allá perdiendo toda cordura por un ataque de hambre.
#3 No bañarnos
Con tanto perfume ¿quién lo notaría? Honestamente a veces por decisión o necesidad es que saltamos el baño pero son tantos los trucos que nos sabemos que nadie podría notar la diferencia.
#4 Mirar a los hombres
Es sabido que podemos mirar sin reparo a otras mujeres, pero también lo hacemos con los hombres dándonos nuestro buen taco de ojos.
#5 Stalkear sus fotos
Bueno, este no es ningún secreto.
#6 Reciclar ropa
Aunque previamente hacemos una revisión meticulosa de las condiciones de dicha prenda, somos capaces de ponernos el mismo sostén por días si éste aún huele bien.
#7 Dejar la puerta abierta del baño
A pesar de lo recatadas que pudiéramos ser para otras cosas, usar el baño con la puerta abierta parece ser una costumbre que pasa de generación en generación, a veces ni yo misma lo entiendo.
#8 Rasurarnos
Por más métodos que tengamos a la mano para la depilación efectiva, no hay nada como una buena rasurada en momentos de emergencia, aunque después tengamos que pagar las consecuencias.
#9 Hacer ruidos extraños
Bueno, al final todos somos humanos, pero la realidad es que no somos tan tímidas ya en confianza.