¿Cuando miras la película el naufrago lo único que piensas es «pobre hombre qué va a comer» y de hecho simplemente por pensar eso ya te dio hambre? Entonces eres de las personas cuya vida está determinada por el qué, cuándo y cómo comes, siendo así segúramente has vivido alguna de estas cosas que pasan cuando siempre estamos hambrientos.
A menudo la gente se sorprende con lo que comes
¿Todo eso vas a comerte? Así es y es que no importa que midas 150 y peses 45 kilos, tu estructura física no tiene nada que ver con tu gran apetito
No dejas de pensar en comida
Así estés por entregar un reporte final, haciendo horas extras en el trabajo o a punto de entrar al quirófano… por tu mente siempre hay tiempo para pensar en comida.
No dejas de comer aún cuando estás a dieta
Sabes que más allá de los carbohidratos hay un vasto mundo de alimentos y estás dispuesta a probarlos todos.
Aplicas el «uno no es ninguno»
Prefieres hacer un extra en el gym que quedarte sin probar esa delicia.
Tienes un amorío con la comida
No se trata de comer y ya, es cuestión de percibir cada sabor, cada textura, cada aroma y de enamorarte de lo que comes.
Tienes experiencia comiendo rápido
Sabes que el mundo sigue girando y que para volver a tus rutinas sin dejar de comer hay que adaptarse.
No te gusta que te interrumpan mientras comes
Para ti no hay mayor prioridad que comer y cuando puedes hacerlo con tiempo no te gusta que nadie te interrumpa.
Lo peor que pueden hacer es castigarte el microondas
Para aquellos que tenemos hambre todo el tiempo, no hay mejor aliado que el horno de microondas, donde sea y como sea, no poder usarlo es un terrible golpe.
No sabes cómo la gente puede dormir 8 horas sin que el hambre los despierte
Ni siquiera te cepillas los dientes al acostarte como el resto de la gente porque sabes que en un par de horas estarás comiendo otra vez.
Siempre tienes antojos
Cuando tu madre no sabe qué cocinar hoy recurre a ti pues siempre tienes interesantes ideas y propuestas.
Te vuelves un experto en la cocina
Ha sido tanta tu hambre por años que has aprendido a sacarle provecho a cada especia y lata semi vacía que encuentras en la cocina.
Vas a dónde sea si es que hay comida
Para ti comer es realmente importante, tanto que determina qué tan abierto estás al mundo. «Si hay comida sí voy.»
Por más que intentas controlarte, es mejor aceptar que así eres
Has intentado con hipnoterapia, con la dieta de la luna, con electrochoques pero…simplemente eres así y esperas que como tú lo has aceptado la gente también, no sin antes guardar un snack en tu bolsillo.
Sigue leyendo: Situaciones que solo reconocerás si odias despertarte temprano