Cretona: actualmente se conocen con el nombre de cretonas las telas clásicas inglesas, originalmente se trataba de un lino de hilos gruesos, con las que se tapizaban sillas y sofás. Es un tejido muy resistente. Son típicos sus estampados florales. Las cretonas se usan para tapizar, hacer cortinas, fundas y colchas.
Damasco: similar al broquel, pero más ligero y sin relieve, procede originalmente de la ciudad homónima. A menudo es de un único color. Se teje de modo que resulta reversible. Los motivos son casi siempre florales. Se emplea mucho en la confección de mantelería fina.
Espolinado: es espolín es una antigua lanzadera de pequeño tamaño usadp en la elaboración de bordados florales,, especialmente en la Edad Media. Ahora, el término se aplica a telas parecidas, también con motivos florales realizados con distintas trama. Tienen un tacto agradable, similar al del broquel.
Etamín: similar al organdí, pero más maleable. Es un tejido de hilo de seda o de algodón fino. Se confecciona con mezclas de poliéster. Por su buena caída y porque es diáfano, se emplea mucho en la elaboración de visillos.